Autora: Katerina Markelova 

UNESCO

La crisis que ha causado en la educación el cierre de escuelas y universidades en el mundo entero, decretado con miras a frenar la propagación de la pandemia del COVID-19, alcanzó su punto máximo a mediados de abril. Entre el 16 y el 19 de ese mes, los centros de enseñanza permanecieron cerrados en más de 190 países, lo que afectó a 1.570 millones de niños y jóvenes, es decir, a más del 90 % de los alumnos. Durante toda la crisis sanitaria, la UNESCO ha dado seguimiento a la situación a escala mundial, mediante la publicación en su página web de una lista de instituciones educativas cerradas.

La opción de la enseñanza a distancia mediante el uso de la informática, recurso al que acudió la gran mayoría de los países para garantizar la continuidad de la educación, ha conferido un relieve aun mayor al problema de la brecha digital. Aproximadamente la mitad de los estudiantes del mundo –unos 826 millones– carece de ordenador en casa y el 43 % –706 millones– no dispone de conexión a Internet. La falta de conexión resulta especialmente inquietante en el África subsahariana, donde la proporción de jóvenes que carecen de acceso a la red en el hogar alcanza el 80 %.

Según una encuesta reciente de la UNESCO sobre las medidas adoptadas en 59 Estados para limitar la repercusión del cierre de las escuelas, solo el 58 % de los países de bajos ingresos dispone de plataformas de aprendizaje en línea. El 64 % de los docentes que respondieron a la encuesta (independientemente de su nivel de ingreso) carece de competencias informáticas suficientes para impartir clases por Internet. Otro tanto ocurre con el 80% de los padres, mientras que el 48 % de los alumnos tampoco está capacitado para recibir ese tipo de enseñanza.

En este artículo se examinan algunas de las iniciativas para ampliar la conectividad que se han emprendido en el marco de la Coalición Mundial para la Educación, lanzada por la UNESCO el pasado 26 de marzo. Más de cien instituciones, tanto públicas como privadas, aunaron sus competencias a fin de proponer soluciones rápidas, gratuitas y adaptadas a los países que carecen de la tecnología, los contenidos o las competencias necesarias para el aprendizaje a distancia.

Sobre el mapa que muestra la distribución del cierre de escuelas en el mundo en el momento álgido de la crisis (situación del 17 de abril), figuran también algunas de las medidas adoptadas por los miembros de la Coalición Mundial para la Educación con miras a reforzar el aprendizaje a distancia.

Ejemplos de acciones llevadas a cabo por la Coalición para ampliar la conectividad:

● La empresa de telefonía móvil Orange proporcionó acceso gratuito a través de Internet a contenidos pedagógicos digitales en el África subsahariana: Burkina Faso, Guinea, Malí y República Democrática del Congo, y en los Estados árabes de Egipto, Jordania, Marruecos y Túnez.

● En Gabón, la UNESCO capacitó a 60 monitores pedagógicos de primaria y secundaria en lo relativo a la enseñanza por Internet y puso a disposición del gobierno los cursos elaborados en el marco del proyecto Formar a mi generación – Gabón 500.

● En el Líbano, la UNESCO y el fondo mundial La Educación No Puede Esperar [Education Cannot Wait], con el apoyo del gobierno de Francia, proporcionaron contenidos didácticos digitales al Ministerio de Educación y Enseñanza Superior. En total, 297 cursos de matemáticas, ciencias y lengua francesa en formato vídeo, cortesía de la red educativa Canopé(link is external), están disponibles en la plataforma de Internet creada por el Ministerio.

● En las islas Samoa, Vodafone entregó gratuitamente a unos 80.000 alumnos una tarjeta SIM para estudiantes que proporciona acceso ilimitado por Internet a datos de 4G, en un conjunto de sitios educativos homologados.

● La UNESCO y otros miembros de la Coalición, entre ellos Moodle(link is external), la Academia Khan(link is external) y Lark(link is external), han coordinado cursos de formación en línea, con el fin de dotar a los docentes de las competencias necesarias para impartir enseñanza por Internet en cinco Estados insulares del Pacífico: Kiribati, Nauru, Papúa Nueva Guinea, Samoa y Tonga.

Fuente del Artículo:

https://es.unesco.org/courier/2020-3/educacion-atraviesa-crisis-precedentes