Marcelo Rivera*

No es una época de cambios, sino un cambio de época que estamos viviendo y una extraordinaria oportunidad para repensar la educación, los modos de enseñar y de aprender en contextos de complejidad.

Vivimos en un país con grandes carencias, inserto en una de las regiones del planeta más impactadas por la pandemia, en un mundo que pone en marcha sus estrategias para salir de la crisis sanitaria y económica que dejó en evidencia la impericia en la gestión y el fracaso de las organizaciones para detener el tsunami.

Luego de la experiencia vivida, ¿cuáles han sido los aprendizajes más significativos y relevantes que podemos atesorar? ¿Nos sirvieron tantos meses de restricciones para repensar las estrategias que puedan mejorar nuestro sistema educativo? ¿Hemos mejorado la infraestructura de las escuelas o la calidad de conexión a internet? ¿Hemos capacitado a los docentes en educación emocional o en el manejo de la tecnología para que estén a la altura de los desafíos? ¿Creamos comunidades de aprendizaje en red o asociaciones de profesionales que colaboren con las instituciones educativas para mejorar contextos educativos?

Sin lugar a dudas, es tiempo de cuestionarnos para qué hemos hecho lo que hicimos en lo que va del ciclo escolar y, sobre todo, desde qué compromiso, desde cuáles creencias, desde qué ideología no hicimos alguna de las cosas que pudimos hacer para dar lo mejor de nosotros para así dar mejores posibilidades al otro en marco de la dificultad que significa trabajar hoy por una mejor educación en la Argentina.

Desde Revista COLEGIO hemos realizado más de 50 emisiones gratuitas de contenidos con referentes educativos nacionales e internacionales a través del ciclo de Entrevistas de @revistacolegio en Instagram Live. Hemos realizado más de 20 jornadas gratuitas de orientación vocacional “DECIDIR online” donde participaron más de 5.000 alumnos de las instituciones que participan en nuestra comunidad que están por terminar el nivel Secundario y se enfrentan ante el desafío de elegir un camino para su futuro. También colaboramos con la organización de los prestigiosos congresos educativos de COORDIEP, del Polo Educativo Pilar, de FAERA, con el ciclo de webinars de la Asociación EGE, con las jornadas de ADEEPRA, en el ATENEO VESS organizado por EDU 1st lanzando a partir de este año el primer Edu Journal, con el Congreso Internacional “Corazón Lector” que organizó GLIFING desde Barcelona, en las Olimpíadas de Matemáticas de MATIFIC y con asesoramiento permanente en comunicación institucional y charlas de capacitación en liderazgo, coaching educativo, educación emocional, nuevas plataformas tecnológicas de enseñanza y nuevas tendencias.

No nos hemos paralizado por la situación. Hemos generado aún mayores redes con escuelas que no nos conocían y que nos han descubierto gracias a nuestra tarea en las redes, al sitio revistacolegio.com o a la difusión viral de nuestra revista, conectando seguidores, suscriptores nuevos de a miles, a personalidades y a referentes educativos, a escuelas de toda la Argentina, de Chile, Uruguay, Perú, Ecuador, Colombia, Costa Rica, Guatemala, México, Miami y España que hoy siguen con interés nuestros contenidos y capacitaciones. Y sobre todo, hemos tratado de inspirar a los chicos y a las chicas de los colegios que nos siguen en comunidad para que entiendan que estudiar es darle una oportunidad a su futuro. Así como a los docentes para que se animen a innovar, a trabajar colaborativamente y a los directivos y directores para que potencien a sus equipos y lideren con compromiso el cambio hacia una educacioìn a la altura de los desafíos de este tiempo.

Desarrollamos con pasión la tarea de tejer esta red que esperamos siga nutriéndose cada día con apasionados como nosotros y les dejamos en sus dispositivos para que compartan la edición Nº95, repleta de condimentos para disfrutar y también una invitación a nuestros próximos webinars y congresos (sigan nuestra agenda en redes sociales). Seamos protagonistas del cambio y no espectadores de la tragedia educativa.

*Director de Revista Colegio

Fuente:

¿Protagonistas del cambio o espectadores de la tragedia educativa?