Publicado: 2 noviembre 2021 a las 4:00 pm
Categorías: Artículos
Por Daniel Hernández Franco, Adela Vega Guerra y Gabriela Espínola Carballo
“Una forma de mejorar nuestra práctica docente en línea es mediante contenidos más detallados, clases más prácticas y vivenciales, con el apoyo de expertos invitados en diferentes temas del curso”.
Cuando nadie lo esperaba, sucedió, la pandemia envió a estudiantes de todos los niveles educativos a estudiar desde casa. El Tec de Monterrey no fue la excepción y tuvimos que reformular lo que hasta ese momento conocíamos como educación a distancia. Esta experiencia reforzó la idea de que, para lograr un mejor aprendizaje en los estudiantes debemos considerar sus inquietudes y necesidades y así despertar en ellos un mayor interés de su propio aprendizaje. Durante el periodo de confinamiento prolongado aprendimos que la empatía y la sensibilidad son habilidades que debemos desarrollar para ayudar a los estudiantes a enfrentar los retos que enfrentarán en distintos momentos de su formación académica.
Estos 19 meses de pandemia afectaron el curso académico regular en todas las escuelas, ya que, a diferencia de un formato presencial, la interacción con el alumno y el seguimiento a sus dudas en una clase virtual se vuelve más complicada. Ante la dificultad de mantener una interacción efectiva con los profesores, hemos visto cómo las madres y padres de familia tuvieron que realizar tareas de acompañamiento y seguimiento a las actividades de niñas y niños cursando preescolar, primaria o secundaria. En muchas ocasiones tampoco eran los más aptos para responder dudas o rezagos académicos de sus hijos, sin embargo, fue un desafío que tuvimos que enfrentar en la mayoría de los hogares debido al confinamiento por la emergencia sanitaria.
La clase fue una oportunidad de compartir en familia momentos en que la pandemia afectó nuestra convivencia con otros. “¡Papá dice que muchas gracias! ¡Él tomó el curso junto conmigo, y estamos muy satisfechos!”.
En el contexto de los alumnos de educación universitaria, sucedió algo similar, pero tratamos de adaptarnos mejorando nuestra práctica docente mediante contenidos más detallados, clases más prácticas y vivenciales, de la mano de invitados expertos en diferentes temas del curso. Generamos mayor interacción y dinamismo en la clase dado el interés de los alumnos en los temas explicados por los invitados expertos. También los estudiantes tuvieron la oportunidad de colaborar y compartir sus propias ideas, posturas y propuestas. En este artículo compartimos nuestra experiencia.
Para fines de esta contribución queremos compartir la experiencia que tuvimos durante la impartición del período intensivo de invierno 2021 en la clase Política Mexicana: evolución y desafíos. Es una unidad formativa que forma parte de la oferta de Experiencias Digitales en nivel licenciatura del Tec de Monterrey. Esta unidad formativa se ofrece a todos los campus del Tec en modalidad ELITE. Los cursos en modalidad ELITE son aquellos que son impartidos por profesores titulares con una experiencia única en su disciplina e invitados especiales con una trayectoria y experiencia en su profesión que enriquecerán y aportarán valor a los contenidos del curso a través de sesiones sincrónicas semanales por ZOOM.
En esta asignatura participaron 85 estudiantes de diferentes carreras y de 15 campus diferentes. Abordamos temas como la conformación del sistema político en México, en especial, las condiciones para el ejercicio democrático; los pesos y contrapesos democráticos; y la respuesta de los gobiernos emanados del mandato democrático a los anhelos y demandas sociales en diversas áreas.
Previo a la suspensión de actividades presenciales por la pandemia, este curso ya se desarrollaba en un modelo que combinaba la participación sincrónica de estudiantes que acudían a un aula en forma presencial y contaban con el apoyo de facilitadores académicos (rol de apoyo en el salón), que se conectaban por videoconferencia a Zoom desde un aula acondicionada con cámara, pantallas y audio para permitir el diálogo y debatir sobre los diversos temas con los invitados especiales.
Desde la decisión de cerrar las aulas presenciales en el Tec de Monterrey nos trasladamos a un modelo sincrónico a distancia. Aspiramos a mantener un alto nivel de interacciones, lo cual implicó un diseño más detallado de las sesiones que a continuación les presentamos:
Incluimos invitados especiales que despertaran el interés en los temas de la clase. Ciertamente para nuestro modelo de impartición ELITE ésta es una de las principales características. Sin embargo, hemos apreciado que contar con invitados especiales con una trayectoria y experiencia en su profesión, despierta la curiosidad e interés de los estudiantes.
Detonamos la participación con preguntas con “gancho” o impacto en el tema. Esto lo logramos despertando en los alumnos curiosidad en los temas de cada semana compartiendo noticias de impacto en el acontecer del país.
Conocimos a tiempo las opiniones de los alumnos. Aplicamos encuestas rápidas en cada sesión en las que contamos con invitados, esto lo hacemos a través de Google Forms al final de cada clase, para conocer su opinión acerca de los invitados, el interés que despertó en el tema y como el expositor contribuyó en ello o bien determinar acciones oportunas.
Animamos a los estudiantes a contribuir activamente en las sesiones. Ayudó mucho incluir actividades del tipo presentaciones grupales en las que compartieron reflexiones, ya sea mediante videos para ser presentados en clase o con exposición sincrónica. De esta manera los alumnos se dieron a la tarea de investigar, analizar y compartir información.
Utilizamos herramientas digitales que fomentan la participación de los estudiantes. Preparamos sesiones con segmentos cortos que permitieran a los alumnos “interrumpir” el flujo de la presentación del maestro para incorporar las voces de los estudiantes al calor de la temática. Esto lo logramos realizando preguntas que detonaran la participación haciendo uso de herramientas de interacción como Mentimeter y Kahoot. También utilizamos Padlet para la organización de los diferentes recursos utilizados en clase, como YouTube, presentaciones y videos.
Mantuvimos los canales de comunicación activos, las inquietudes deben de ser atendidas en forma inmediata. Facilitó mucho el seguimiento y la estrecha comunicación con los alumnos durante la impartición de la clase a través del chat de Zoom así con el uso de REMIND, ésto nos permitió tener una comunicación inmediata y abierta lo cual brindó el espacio para poder responder y compartir ideas con el equipo docente.
Conforme se desarrollaba el curso nos sorprendieron mensajes de agradecimiento por parte de las alumnas y alumnos a todos por el esfuerzo:
“¡Papá dice que muchas gracias! ¡Él tomó el curso junto conmigo, y estamos muy satisfechos!”
“Jajajaja, que cool, los míos igual”
“¡Maestro, mi mamá igual no se perdía ninguna de sus clases!”
“Mi mamá también lo escuchaba porque se le hacía interesante lo que se hablaba en la clase”
Estos son solo algunos comentarios que dejaron los estudiantes durante esta experiencia de aprendizaje, que nos mostró una dimensión de fortalecimiento de lazos familiares asociados a los aprendizajes a distancia, que no sabíamos que ocurrirían.
Se estableció en algunos casos que padres y estudiantes compartían el tiempo de la clase, asociándolo al valor de aprender. Esto fortalece el mensaje de la relevancia del estudio en el desarrollo de las personas. El curso fue también una oportunidad de compartir en familia momentos en que la contingencia de salud afectó nuestra convivencia con otros, y en diversas ocasiones implicó tensiones en los hogares por un aislamiento ya prolongado. Es muy satisfactorio haber ofrecido un breve espacio para una convivencia positiva diferente durante el encierro.
Las clases con los invitados expertos y las sesiones adicionales para dar seguimiento a sus dudas permitieron a los alumnos asociar la información nueva con la que ya conocían, reajustando y reconstruyendo ambas en el proceso. Como equipo docente nos dimos a la tarea de buscar cómo cerrar la brecha digital que suponíamos se haría más grande derivada de la necesidad de movernos a lo digital. Consideramos que fomentando la creación de un entorno de aprendizaje donde el estudiante sea partícipe de lo que aprende y del modo en que lo hace, avanzaremos mucho en tener clases más dinámicas.
Cuando pensamos en cómo transformar la educación no solamente debemos buscar mejorar las prácticas tradicionales sino también fortalecer la confianza y abrir el camino a los estudiantes para hacer las cosas mejor.
Daniel Hernández Franco (daniel.hernandez@tec.mx) es economista por la Universidad Autónoma Metropolitana. La Universidad Mesoamericana de San Cristóbal de las Casas le otorgó el Doctorado Honoris Causa en 2015, por sus aportaciones a la política social.
Actualmente es profesor investigador en la “Iniciativa de Educación con Equidad y Calidad” de la Escuela de Gobierno y Transformación Pública del Tecnológico de Monterrey. Ha publicado más de 60 trabajos en libros y revistas especializadas y de difusión en temas de educación, demografía, política pública y evaluación de programas de política social.
Adela Vega Guerra (adela@tec.mx) es Licenciada en Administración de Empresas por el Tec de Monterrey, Maestra en Administración también por el Tec de Monterrey.
Actualmente Coordinadora Académica del área de Ciencias Sociales y Gobierno en Profesional para Educación Digital.
Gabriela Espínola Carballo (gabriela.espinola@tec.mx) es Licenciada en Economía por el Tec de Monterrey, Maestra en Gestión Pública Aplicada también por el Tec de Monterrey. Actualmente es Profesora Tutora del área de Ciencias Sociales y Gobierno en Profesional para el área de Experiencias Digitales, en cursos ELITE.
Fuente:
Deja un comentario