Un nuevo horizonte creativo para el arte
Por: Sheila Ramírez
El acceso al arte en Latinoamérica se mantiene al alza. Entre convergencia presencial y digital se observa un infinito de posibilidades para conectar tanto con la creación material como la intangible.
Los NFT (Non Fungible Token) irrumpieron en el ámbito del arte con mayor fuerza el año pasado y todo indica que llegaron para quedarse. Con la tecnología de su parte como medio de difusión, venta, pago y almacenaje, pasó de ser un instrumento artístico emergente a toda una revolución.
El Diccionario Collins define como NFT a un “certificado digital único, registrado en una cadena de bloques (blockchain), que se utiliza para registrar la propiedad de un activo, llámese una obra de arte o un objeto de colección”. Esta tecnología, relacionada en principio con las criptomonedas, permite la transferencia de datos digitales de forma codificada y descentralizada, lo que supone seguridad absoluta.
“Los NFT implican un cambio de paradigma en el coleccionismo. El arte es una manifestación del presente y, si el presente tiene una tendencia a la virtualidad, ¿por qué no habría de evolucionar en ese sentido?”, reflexiona Eduardo López Morton, director de Morton Subastas, sin dejar a un lado el hecho de que este movimiento ha permitido a los creadores digitales integrarse al mercado y, a los artistas consagrados, continuar trascendiendo.
Basta con recordar que, en diciembre pasado, la casa vendió el NFT de la obra “Latidos euclidianos en el Metaverso”, del multifacético artista y diseñador Pedro Friedeberg. La pieza alcanzó un precio de 110,880 pesos mexicanos.

Foto. Cortesía de Morton Subastas
En términos globales, el valor de las obras de arte vendidas en Sotheby’s, Christie’s y Phillips alcanzó los 6,500 millones de dólares (mdd) en el año 2021. Las casas de subastas eran vistas como lugares inaccesibles, donde se ofrecían piezas a precios inalcanzables.
Esa percepción ha cambiado notablemente. “El cierre temporal de nuestros salones, por la pandemia, fue desafiante; pero nos dimos cuenta muy pronto que era, también, una oportunidad para encontrar canales en la virtualidad, que nos conectaran con nuestros clientes”, dice Morton, y reconoce que el reto a futuro es seguir evolucionando para responder a las necesidades, tanto de consignantes como de compradores.
En la opinión de Ana Inés Spinetto, directora de BADA, el mundo se dirige hacia la autogestión y, por lo tanto, los NFT serán parte de nuestra vida diaria.
“Sin embargo, los usos de la ‘tokenización’ en el arte realmente acaban de empezar. Lo que vemos es la primera fase en la que, creativa mente, se están mezclando muchas subculturas, desde la de los video juegos, hasta la animación, pasando por el sector del lujo y la música. Son tiempos interesantes para ver cómo conviven todos estos conceptos”.

Categorías